La importancia de dominar la Educación matemática.
El papel que juega las matemáticas en la sociedad actual continúa siendo de vital importancia, para todo el mundo. No obstante, cuando las matemáticas son abordadas en las aulas, el panorama resulta casi siempre aburrido y desmotivador para los alumnos debido a que hay quienes creen que es compleja, no entendible por la gran mayoría y resulta difícil de aprenderla. Quizás éstas sean algunas de las razones por las que suele gustar a un reducido grupo muy reducido de estudiantes.
La visión general de las matemáticas es que tiende a ser una asignatura aborrecida y odiada por quienes no la entienden, generando, en consecuencia, frustración, angustia y aversión casi colectiva, en vez de satisfacciones por los logros obtenidos (Martínez Padrón, 2003). La situación suele agravarse, aún más, cuando se evalúan los contenidos matemáticos aprendidos en las aulas. En general, estos resultados son reportados como deficientes y generan gran preocupación en todos los alumnos, pero cabe destacar que las matemáticas nos puede servir como ayuda en lo problemas que se llegan a presentar en la vida cotidiana, los problemas que se manifiesten en ella llegan a ser algo dificultosos para muchas personas, pero en varias ocasiones las matemáticas contribuyen a tramitar una respuesta, esto es debido a que contribuye al desarrollo mental y por lo tanto, tras un análisis, mostrará resultados exactos y soluciones puntuales.
Cuando se enseña o se aprende matemáticas existen muchos factores que marcan el afecto que se produce hacia esta área del saber o hacia los procesos ligados a ella. Estos factores, están fuertemente implantados en los sujetos, los cuales son los responsables de muchas de las acciones y comportamientos ante objetos involucrados en dicho proceso.
Además, definen un dominio que incluye, creencias, emociones, sentimientos, actitudes, valores, comportamiento moral y ético, atribuciones, motivación y desarrollo personal y social
Como puede observarse anteriormente, son muchos los factores que podrían definir el dominio afectivo de los sujetos y mientras mayor sea el número considerado, mayor sería la complejidad de su estudio y sus repercusiones en la educación matemática. Por lo tanto , las emociones y las actitudes serán los factores considerados como los componentes básicos del dominio afectivo.
Las emociones están conformadas por un sistema de tres componentes:
1. El perceptivo: destinado a la detección de estímulos. Incluye elementos hereditarios y también fruto de las experiencias del sujeto.
2. El motivacional: encargado de impulsar, mantener y dirigir la conducta de los sujetos hacia determinados objetos.
3. El conductual: depende de tres manifestaciones que son la reacción fisiológica perceptible, los pensamientos, y por último la conducta manifiesta.
Aunque en las últimas dos décadas es cuando se han venido concretando, con gran relevancia, estudios que aborden el campo de las emociones y sus repercusiones en la educación matemática, no hay que olvidar cómo plantear y resolver problemas. Para la resolución entra en juego el papel de la voluntad personal, la determinación, que varía según la esperanza o el abatimiento y la satisfacción o la desilusión y por último las emociones juegan un papel importante en su resolución, por lo que sería un error creer que la solución de un problema es un asunto puramente intelectual.
Las actitudes son instancias que predisponen y dirigen al sujeto sobre hechos de la realidad, filtran las percepciones y orientan el pensamiento para adaptarlo al contexto. Son organizaciones duraderas de procesos motivacionales, emocionales, perceptuales y cognitivos con respecto a algún aspecto del mundo del individuo.
Podemos afirmar que las actitudes vienen a ser predisposiciones comportamentales u orientaciones afectivas que un sujeto adquiere y que acompaña con una reacción valorativa o evaluativa manifiesta a través del agrado o desagrado hacia algún objeto o situación.
Sobre la base de estas maneras de manifestación o de expresión se precisan cuatro componentes que son el saber, el sentir, las intenciones de cada uno y el comportamiento
Respecto a las características de las actitudes podemos decir que no son innatas en el sujeto, sino aprendidas, son relativamente estables, tienen gran importancia social, se pueden expresar a través del lenguaje verbal o no verbal.
La consideración de los variados factores que configuran el dominio afectivo en la educación matemática ha tenido tanta relevancia que últimamente ha sido considerado como clave para la descripción, el análisis, la comprensión o la explicación de muchas situaciones que suceden en el ámbito matemático.
En relación con el aprendizaje de la matemáticas, Gómez Chacón (2000) manifiesta que entre éste y los factores del dominio afectivo existe una interacción, y lo vemos en lo siguiente:
1. Cuando un estudiante aprende matemáticas obtiene alguna experiencia que le puede provocar reacciones que influyen en la formación de sus creencias acerca de la Matemática y acerca de sí mismo en relación con las matemáticas.
2. Es posible generar tensión en aquellos estudiantes que aprenden matemáticas.
3. Las reacciones emocionales de los alumnos expuestos repetidamente a situaciones repetitivas pueden convertirse en actitudes que contribuyen en la formación y mantenimiento de creencias.
Por todo ello, vemos que a lo largo de todo este estudio estudio se pueden ver referencias del dominio afectivo y su repercusión actual en la educación matemática. Por lo tanto, la relación entre docente y estudiante en el ámbito matemático llega a ser muy relevante, puesto que las actitudes, y las creencias que presentan ambos sirve como una manera de lograr cambios importantes.
Destacamos las siguientes consideraciones:
El aprendizaje debido a interacciones con los compañeros y a su entorno educativo, que generará un comportamiento más afectivo.
La involucración del docentes exigiendo que todos compartan un desarrollo en el conocimiento en la didáctica educativa, no solo en las matemáticas sino en todas las asignaturas
El docente como un ejemplo y demostración en el área de las matemáticas, puesto que los estudiantes en su aprendizaje matemático depende en medida de los mensajes que recibe del docente.
Se dice por parte de algunos alumnos que las matemáticas no son faciles y llegan a aborrecerlo, esto es debido a la falta de conocimiento en la materia o, en algunos casos por la actitud que presenta el estudiante.
En conclusión el dominio afectivo y educativo de las matemáticas, nos ha permitido saber que acciones son para mejorar el ámbito de los estudiantes, tomando en cuenta sus creencias, concepciones, emociones y principalmente su actitud. Partiendo de ello, los estudiantes son los protagonistas de los encuentros afectivos e interacciones con las matemáticas,y el contexto en el que se encuentran, es decir, la interacción con sus compañeros y familiares , con el fin de desarrollar el proceso de Enseñanza-Aprendizaje.
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